La biografía estaba prevista para Julio de 2025, pero su lanzamiento fue pospuesto a Septiembre en medio de presiones legales vinculadas al entorno de Axl Rose, quien habría buscado frenar su salida.
La tensión entre Niven y Rose se remonta a 1991, cuando el vocalista se negó a continuar trabajando en los discos Use Your Illusion si Niven seguía al frente del management. Finalmente, las partes se separaron tras un acuerdo extrajudicial, firmado por Slash, Izzy Stradlin y Duff McKagan, pero no por Rose.
En diálogo con Classic Rock, Niven afirmó que el cantante incumplió los términos de aquel acuerdo y que, cansado de sus declaraciones públicas, decidió contar su versión en un libro. “Slash me escribió alentándome a terminarlo, diciéndome que tengo derecho a hablar”, relató.
El exmánager también apuntó contra Rose por querer “controlarlo todo” dentro de la banda y por minimizar su rol en los inicios del grupo. “Axl parece olvidar que nadie, y digo nadie, quería ser su representante en 1986”, disparó.
Según Niven, el líder de Guns N’ Roses concentra actualmente el 50% de los ingresos del grupo, lo que —sumado al intento de censura— demuestra que “nada ha cambiado” en la dinámica de poder dentro de la banda.
El lanzamiento de Sound N’ Fury sigue en suspenso, pero promete ser una lectura explosiva para los fanáticos del rock y una nueva fuente de polémica en torno al universo GNR.